Las claves de la propiedad intelectual para innovar
Fecha de publicación: Aug 27, 2012 7:52:11 PM
Proteger el conocimiento, la creación, a través de diferentes procesos como patentes, registro de diseños industriales o registro de marcas, entre otros, son temas que conciernen a la propiedad intelectual. Se trata de un área que toca todo aquello que produce el ser humano: el conocimiento y las ideas que, aunque no las protege un sistema, sí generan un derecho que hace parte de la producción intelectual.
Según María Ximena Borrás, asesora de Ruta N en el tema de patentes para el programa Neri –Nuevas Empresas Resultado de Investigación–, “hay que diferenciar claramente que la propiedad intelectual no se restringe a los derechos de la misma. Es un régimen que establecieron los estados en su momento para proteger o capitalizar el conocimiento, y también los diseños, las invenciones, las obras artísticas y literarias… Es un régimen jurídico –podemos decir– que protege ese tipo de creaciones y de signos que hacen que una compañía se diferencie en el mercado”.
Así, la propiedad intelectual se debe tener en cuenta desde la concepción misma de la idea, en los laboratorios y centros de investigación, porque, tal como afirma Borrás: “Lo que se debe transmitir a los investigadores es que este tema, y específicamente el de patentes, no se aleja del quehacer científico, y si se tiene el interés de llevar la investigación al mercado, entonces es un tema también estratégico. Es una herramienta que nace de la ciencia, pero que va a potenciar el conocimiento, ¿por qué? Porque lo capitaliza. Es el título valor que tiene detrás el conocimiento generado. Entonces es la perfecta unión entre el quehacer científico y el mundo empresarial”.
Este es el enfoque que se le está dando desde Ruta N, por ejemplo, en los talleres ofrecidos a los proyectos que participan en Neri, pues se trata de investigaciones que buscan convertirse en empresas de alto impacto y que necesitan una asesoría en el tema de protección de las ideas. El proceso, según lo explica la asesora, ha sido de intervención: “Primero les dimos una capacitación sobre el tema de propiedad intelectual, pero visto desde la perspectiva científica y estratégica, que es nuestro enfoque diferente en Ruta N y en los proyectos que tenemos: Nruta y Neri”. Un trabajo que ha empezado a trazar una nueva senda en el camino de convertir las investigaciones en negocios con potencial.
Algunos consejos sobre propiedad intelectual
Si usted tiene una idea, una creación o un producto, debe tener presente las siguientes claves de las que habla nuestra experta al momento de pensar en la protección del conocimiento aplicado.
No hacer divulgaciones tempranas: si se empieza a hablar de la solución sobre la que se está investigando, se puede afectar la seguridad de la idea antes de patentar el resultado.
Nunca divulgar el Know How: hay que ser muy cuidadosos con los detalles específicos de cómo se ha llegado a la solución, porque estos son procesos que llevan muchos años de trabajo y es necesario protegerlos.
Lo sencillo también se puede patentar: es importante tener en cuenta que lo sencillo puede ser sinónimo de inventivo, es decir, patentable. Si un investigador resuelve un problema técnico –que puede ser una necesidad del mercado o una necesidad social– puede estar ante una patente, independientemente de que lo resuelva de una manera muy sencilla. No solamente es patentable lo complejo.
Tener muy claro quién es el inventor: un elemento clave al momento de hablar de propiedad intelectual es saber quién aporta intelectualmente al desarrollo sobre el que se trabaja y a la solución de un problema concreto.
La tecnología desarrollada puede ir más allá de la idea inicial: el investigador debe tener en cuenta que la tecnología no debe restringirse a la aplicación inicial, sino que es necesario pensar en todas las posibles aplicaciones, independientemente de que se hayan probado o no. Hay que pensar que la tecnología tiene un espectro de aplicación mucho más amplio.
Confidencialidad: esta debe ser una práctica muy estricta en los grupos de investigación. No por desconfianza entre los investigadores, sino por el valor que tiene la información que es posiblemente capitalizable. Son documentos sencillos que obligan a las personas que manejan la información a no hacer uso de ella en un contexto distinto al de la investigación misma.
Patentar por patentar no sirve: la decisión de patentar o no, debe responder a decisiones de protección de conocimiento y a decisiones estratégicas en cuanto al mercado. Siempre debe hacerse un análisis sobre la pertinencia de patentar, y sobre todo si ese título que significa la patente va a permitir tener un retorno. Y el retorno es válido en el mundo académico y en el mundo empresarial.
Ver la tecnología de cara al mercado: debe pensarse de esta forma para saber si se va a dar ese retorno; es decir, saber si hay alguien interesado en el resultado de la investigación. Como alguien dijo alguna vez “si usted tiene un interesado, patente, si tienen dos, no lo dude”. Es muy importante revisar los antecedentes de mercado o científicos; hay una necesidad constante de solucionar un problema específico, entonces la solución hay que patentarla.
Buscar apoyo y asesoría en el tema de propiedad intelectual: en este sentido se deben generar relaciones de confianza. El asesor en propiedad intelectual o quien acompañe a los investigadores en esa etapa debe ser una persona a la que se le tenga confianza y a la que se le pueda contar todo. Alguien que entienda la tecnología que se quiere proteger, que pueda acompañar no solamente en el trámite de la solicitud sino en la identificación de la solución que se ha logrado encontrar con el desarrollo de esa investigación.
En general el ejercicio profesional, el ejercicio científico, el ejercicio creativo conllevan propiedad intelectual en sí mismos. Entonces, el espíritu detrás del régimen de propiedad intelectual es proteger las inversiones en tiempo y en “cerebro” que hacen los inventores y las compañías en busca de una diferenciación que se basa en conocimiento. Se trata de un tema que tiene algo de ciencia, algo del área jurídica y algo de gestión, que no aleja a los creadores de su quehacer y los puede llevar a crear empresas de alto valor agregado que tengan un importante impacto en el mercado y en la sociedad.
Tomado de rutanmedellin